CARNIVOROS

Spinosaurus aegyptiacus

Si todavía creías que el T-Rex era el dinosaurio carnívoro más grande y poderoso del cual se tiene constancia, vas a comprobar que estabas muy equivocado. El Spinosaurus aegyptiacus podía llegar a medir hasta 18 metros de largo y pesar casi 20 toneladas. Se cree que pasaba gran parte de su vida en el agua. Poseía una especie de aleta en la zona vertebral que podía llegar a un tamaño de 2 metros. Está considerado como el dinosaurio carnívoro más grande, al menos es del que se han encontrado restos de mayor tamaño. Dado su tamaño, su agilidad, y su capacidad para moverse en la tierra y el agua, el Spinosaurus puede considerarse como el dinosaurio carnívoro más letal de todos.

Tyrannosaurus Rex

Qué decir del rey de los depredadores. Aunque descubrimientos recientes de fósiles han demostrado que el T-Rex no fue ni el dinosaurio carnívoro más grande ni el más fuerte ni el más completo, sigue siendo uno de los grandes iconos de estos reptiles que se extinguieron de la Tierra hace 65 millones de años. El T-Rex llegó a medir 12 metros desde la cabeza hasta la cola y pesaba unas 8 toneladas. Tenía una de las mordidas más potentes gracias a su enorme mandíbula y sus dientes medían unos 20 centímetros. Podía correr a unos 50 km/h. Es el dinosaurio más famoso de todos, por su imponente y amenazante aspecto, y porque la cultura y las películas lo han popularizado mucho en las últimas décadas.  

Velociraptor

  

El Velociraptor no fue un dinosaurio tan grande y tan potente como los del resto de la lista (unos 2 metros de largo). El Velociraptor basaba su poder en otro tipo de cualidades. Una de ellas era la agilidad, ya que podían correr a gran velocidad y dar saltos de varios metros. Otro era su aguda inteligencia, que le permitía cazar en grupo y crear elaboradas estrategias de ataque. A eso hay que sumarle unas garras preparadas para desgarrar todo cuanto se ponga por delante y unos dientes en sierra afilados como cuchillos. Cabe destacar que el aspecto real del Velociraptor difiere mucho de lo que nos han mostrado películas como Jurassic Park. En realidad, el Velociraptor no tenía un aspecto tan amenazante. Lo verdad es que su aspecto físico se parecía más al de una gallina grande o un avestruz que al de un temible depredador. Recientes estudios han señalado, además, que tenía su cuerpo cubieto de pelo y que, posiblemente, es posible que fuera de color rosa.